Cuando la mayoría de los padres piensan en las consecuencias para los niños, generalmente imaginan consecuencias negativas, como un tiempo fuera o quitar un videojuego. Si bien las consecuencias negativas son fundamentales para cambiar el comportamiento de un niño, las consecuencias positivas también son herramientas de disciplina efectivas.

Cuando se usan juntas, las consecuencias positivas y negativas cambiarán el comportamiento de su hijo , siempre y cuando se usen de manera consistente. Use consecuencias positivas para reforzar el buen comportamiento y haga cumplir las consecuencias negativas para desalentar el mal comportamiento. 

Cómo funcionan las consecuencias

Cada decisión que tomas tiene consecuencias positivas o negativas. Por ejemplo, si va a trabajar, será recompensado con un cheque de pago. Si deja de presentarse al trabajo, es probable que lo despidan, una consecuencia negativa. Los niños no son una excepción.

Puede comenzar a enseñarles a sus hijos lecciones de vida sobre sus elecciones desde una edad temprana.

Puede mostrarles que tomar buenas decisiones, como hacer sus quehaceres o escuchar sus instrucciones, lleva a consecuencias positivas. Por el contrario, puede mostrarles que la mala conducta y las malas decisiones, como la agresión física, tienen consecuencias negativas. Las consecuencias influyen en el comportamiento futuro.

Diferencias entre consecuencias

Los padres a menudo se confunden con el concepto de consecuencias positivas y negativas. Una forma sencilla de recordar la diferencia es que las consecuencias positivas son más proactivas y las consecuencias negativas son más reactivas.


En otras palabras, las consecuencias positivas están diseñadas para alentar a los niños a repetir buenos comportamientos, mientras que las consecuencias negativas se dan en respuesta a un comportamiento que desea que su hijo cambie. 

Si bien es importante brindarle a su hijo un refuerzo positivo para que se comporte de la manera que a usted le gusta, hay ocasiones en las que tendrá que usar consecuencias negativas como tiempos fuera y perder privilegios. Además, es importante utilizar una combinación de consecuencias positivas y negativas. Usar solo un método no es tan efectivo como tener una variedad de herramientas en su arsenal de crianza.

Consecuencias efectivas

Las consecuencias deben ser consistentes para ser efectivas. Si sus hijos se golpean entre sí cinco veces y solo les da una consecuencia negativa tres de esas veces, es posible que no se den cuenta de que este comportamiento es inapropiado. Por otro lado, si sus hijos saben que todo comportamiento agresivo resultará en una consecuencia negativa, será más probable que dejen de golpearse entre ellos.

Las consecuencias también funcionan mejor cuando son inmediatas.

Esperar hasta que papá llegue a casa para repartir una consecuencia o decirles a los niños que van a perder un viaje a la casa de un amigo en dos semanas no será una consecuencia tan efectiva ahora. El refuerzo positivo también debe ser inmediato.   Y cuanto más joven es el niño, más inmediato debe ser el refuerzo.


Por ejemplo, es poco probable que los niños de 5 años se comporten mejor si tienen que esperar un mes para ganar una recompensa. Pero, pueden responder a recompensas más pequeñas y frecuentes que se suman a una recompensa más grande y tardía, como ganar una calcomanía al final de cada día de buen comportamiento seguido de un viaje al parque una vez que ganen cinco calcomanías. 

Cómo utilizar las consecuencias positivas

Los buenos comportamientos a menudo pasan desapercibidos. Pero reforzar las cosas buenas con una consecuencia positiva anima a los niños a mantener el buen trabajo.

Eso no quiere decir que sus hijos merezcan una recompensa cada vez que le ayudan a limpiar la mesa. Hay muchas formas de reforzar el buen comportamiento. Aquí hay algunos ejemplos de consecuencias positivas efectivas: 

  • Atención positiva : hablar con sus hijos, jugar con ellos y reconocerlos puede alentarlos a seguir haciendo un buen trabajo.
  • Elogio : Di cosas como "Hoy estás siendo un buen ayudante" o "Me gusta mucho la forma en que juegas tan silenciosamente con tus bloques".
  • Recompensas tangibles : las recompensas pueden incluir privilegios diarios como tiempo para ver televisión o pueden implicar ganar cosas nuevas, como un viaje al parque. Los sistemas de economía de fichas pueden ser formas muy efectivas de reforzar el buen comportamiento. 

Cómo utilizar las consecuencias negativas

Cuando use consecuencias negativas, asegúrese de que las consecuencias que elija realmente disuadirán el comportamiento de su hijo. Por ejemplo, quitarle el televisor no será una consecuencia efectiva si su hijo adolescente usa una computadora portátil para ver programas en línea.

Y aunque algunos niños pueden extrañar la televisión, a otros puede que no les importe en absoluto si se eliminan sus privilegios de televisión. Como resultado, las consecuencias negativas deben ser específicas para su hijo. A continuación se muestran algunos ejemplos de consecuencias negativas:  

  • Consecuencias lógicas : Las consecuencias lógicas están directamente relacionadas con la mala conducta. Por ejemplo, si sus hijos toman una mala decisión con su bicicleta, quíteles la bicicleta. 
  • Ignorar : si su hijo muestra un comportamiento de búsqueda de atención, como una rabieta, retirar la atención puede ser la mejor consecuencia negativa. 
  • Tiempo fuera : Colocar a sus hijos en un breve descanso podría disuadirlos de volver a comportarse mal.
  • Responsabilidad adicional: asignar tareas adicionales puede ser una consecuencia efectiva. 

Evite recompensar el mal comportamiento

A veces, los padres refuerzan inadvertidamente el comportamiento negativo. Desafortunadamente, esto puede empeorar los problemas de conducta. Por ejemplo, cada vez que le ruega a un quisquilloso que "coma un bocado más" o le dice a su hijo que "deje de lloriquear", puede estar alentando a que continúen esos comportamientos. 

La atención, incluso cuando es negativa, puede ser un fuerte reforzador.

En consecuencia, debe elogiar el buen comportamiento e ignorar algún mal comportamiento leve. Y cuando su hijo rompa las reglas, siga adelante con una consecuencia negativa. 

Una palabra de Verywell

Al implementar las consecuencias, es importante estar tranquilo y ser consistente, especialmente si está usando consecuencias negativas. Use un tono neutral y trate de no hacerlo personal. Explique la consecuencia a su hijo y por qué se está utilizando. Hable sobre las reglas y el comportamiento de su hijo.

El objetivo es que los niños aprendan a modificar su comportamiento cuando se enfrenten nuevamente a la situación. Mientras tanto, busque oportunidades para sorprender a sus hijos haciendo algo bueno y luego refuerce esto con consecuencias positivas. Al implementar ambas estrategias, encontrará que disciplinar a su hijo no es tan difícil como alguna vez imaginó.