Los investigadores de la primera infancia creen que hay una escalera que los niños pequeños escalan en su desarrollo, que incluye pasar de una etapa de juego a otra.

La primera etapa se conoce como juego funcional cuando los niños encuentran simple placer en mover objetos repetidamente y explorar juguetes u otros juguetes a través de sus sentidos. El juego constructivo es la siguiente fase del juego. En esta etapa, los niños pequeños tienen una comprensión profunda de lo que pueden hacer varios objetos; ahora intentarán construir cosas con los juguetes y objetos cotidianos que encuentren a su alrededor.

Cuando la capacidad de atención de un niño se presta al juego constructivo
Alrededor de los 2 años de edad , los niños comienzan a tener una capacidad de atención más prolongada. Esto significa que su hijo puede pasar períodos más largos sentado y concentrado en actividades con un solo juego de juguetes. Durante este tiempo de juego prolongado, es posible que vea a su pequeño moverse de simples juguetes que golpean a moverlos con un propósito.

Puedes ver que esta transición ocurre durante el juego en bloque, por ejemplo. Después de pasar el tiempo en actividades de juego funcional con los bloques, su niño pequeño sabe cómo se siente el bloque, que algunos son más grandes que otros, que si coloca uno sobre una superficie plana y estable, no se caerá. El siguiente paso entonces es que ella comience a apilar los bloques uno encima del otro. Su hijo puede construir una torre básica y luego colocar algunas figuras de Gente Pequeña a su alrededor, mostrando que tiene la intención de crear una casa para sus muchachos.

Consejos para fomentar el juego constructivo
Si bien los niños pequeños son excelentes para convertir cajas, toallas de papel y objetos cotidianos en "juguetes", existen algunos juguetes comerciales excelentes que son buenas opciones para los niños en esta etapa de desarrollo y más allá. Éstos incluyen:
  • Bloques entrelazados como juegos de construcción LEGO Duplo o troncos de Lincoln
  • Suministros de arte como crayones, papel, pinturas, tijeras y pegamento.
  • Plastilina sola o con unas pocas herramientas para esculpir
  • Mesa de arena y agua

Básicamente, busque juguetes y materiales que promuevan el juego abierto. Esto le dará a su hijo la libertad de construir cosas de su propia imaginación versus cosas que un creador de juegos o un artista ha pensado.

Los beneficios del juego constructivo
Cuando los niños pequeños juegan con estos materiales abiertos, tienen la oportunidad de desarrollar muchas habilidades diferentes. Aquí hay una lista corta de lo que pueden aprender a través del juego constructivo.

  • Al construir con bloques tradicionales y entrelazados, los niños pequeños pueden recrear escenas de su vida, como visitar el zoológico, lo que les ayuda a comprender su mundo y procesar información.
  • Construir en arena implica usar un objeto para representar otro, que es el primer paso hacia el pensamiento abstracto.
  • El uso de materiales de arte para crear una imagen o un proyecto les da a los niños pequeños la práctica de usar las habilidades motoras finas que necesitan para escribir y realizar tareas como abrocharse la ropa.
Lo más importante es que el juego constructivo enciende la imaginación mientras prepara a su hijo para el próximo hito, el juego dramático .