El simple hecho de colorear una imagen puede ser muy beneficioso para aliviar el estrés y la ansiedad. Una forma popular de hacer esto es colorear mandalas y usarlo como una forma de meditación .

Esta forma de arteterapia se ha vuelto popular entre los adultos y los niños porque es un ejercicio relajante que puede distraer su mente de otras cosas. Los estudios han demostrado que los círculos geométricos conocidos como mandalas pueden ser particularmente beneficiosos sobre otros tipos de dibujos. 

¿Qué es un mandala?

En sánscrito, la palabra mandala significa "círculo". Los círculos son un símbolo poderoso que se encuentra en todas las culturas. Los vemos en halos, ruedas de oración y otros símbolos religiosos, así como en la arquitectura y la naturaleza.

Los mandalas son círculos sagrados que se han utilizado durante mucho tiempo para facilitar la meditación en las religiones hindúes y tibetanas del hinduismo y el budismo. Muchas otras religiones, incluido el cristianismo y el taoísmo, también han incorporado mandalas en sus prácticas espirituales.

Los mandalas pueden ser dibujos o pinturas reales. También pueden ser creaciones temporales, como los mandalas de arena, que a menudo se desmantelan ceremoniosamente una vez finalizados. La forma del círculo principal de un mandala está llena de una variedad de formas geométricas y símbolos. Estos a menudo se repiten en patrones simétricos utilizando esquemas de colores llamativos.

El proceso de creación de mandalas es tan importante como ver el trabajo terminado. La intención de ambas etapas es centrar la mente y el cuerpo, por lo que son una herramienta ideal para la meditación.

Mandalas como arteterapia

Los mandalas también se pueden utilizar como herramienta curativa para la meditación. Se ha demostrado que la meditación en sí misma reduce el estrés , combate la depresión , reduce el dolor y reduce la presión arterial.

También puede estimular el sistema inmunológico y estimular la liberación de  melatonina , una hormona que se cree que retarda el envejecimiento celular y promueve el sueño. Si bien no está claro qué impacto pueden tener los mandalas visuales, las personas pueden encontrar que son una herramienta útil para su práctica meditativa.

Los mandalas no son solo algo para mirar o meditar. Ahora hay libros para colorear mandalas que pueden ser útiles para cualquier persona. Colorear un mandala con lápices de colores, crayones, pintura o pasteles combina los beneficios de la meditación y la terapia artística en una práctica simple que se puede realizar en cualquier momento y lugar. 

Las personas que colorean mandalas a menudo experimentan una profunda sensación de calma y bienestar.

Es una herramienta simple que no requiere ninguna experiencia, pero puede ser muy reconfortante y nutritiva. Los mandalas no solo enfocan tu atención sino que también te permiten expresar tu lado creativo, que muchos de nosotros descuidamos en nuestra vida diaria.

Pueden resultar especialmente útiles para:

  • Niños : colorear mandalas puede ayudar a los niños a lidiar con las emociones y a sobrellevar la enfermedad. En lugar de verbalizar sus sentimientos, muchos niños se expresan a través del color y el arte. La psicóloga Barbara Sourkes, Ph.D., ha utilizado estas "ruedas de colores" para niños con cáncer y sus hermanos. Ella señala que se puede usar con niños de hasta 3 años y que es un ejercicio en el que no temen revelar sus sentimientos como lo haría un dibujo infantil típico.
  • Personas con una enfermedad terminal : la Universidad de California en Irvine Cancer Center y el University of Pennsylvania Cancer Center son solo dos centros de cáncer que han ofrecido talleres de mandala para sobrevivientes de cáncer.
  • Personas que quieren dejar de fumar : por la misma razón que muchos fumadores comienzan a tejer cuando dejan de fumar, colorear mandalas puede mantener sus manos ocupadas y ayudar a aliviar el estrés. Puede traer su libro de mandalas para que pueda recogerlo durante varios minutos cada vez que sienta la necesidad de fumar .

Sin embargo, los mandalas no son para todos. Colorear un mandala implica movimientos repetitivos y agarre. Esto puede agravar el dolor de la artritis reumatoide y la osteoartritis en los dedos. También puede causar dolor en personas con síndrome del túnel carpiano, epicondilitis lateral (codo de tenista) y otras formas de lesiones por esfuerzo repetitivo.

No hay mucho para colorear un mandala con fines de meditación. Solo requiere unos simples pasos y un tiempo en el que pueda estar solo.

  1. Necesitará crayones, lápices de colores, tizas, pasteles, pintura o marcadores en una variedad de colores.
  2. Imprime un mandala o usa un libro para colorear mandala.
  3. Encuentre un lugar tranquilo y cómodo donde pueda trabajar cómodamente sin distracciones.
  4. Empiece a colorear.

Al colorear, trate de no pensar demasiado en su elección de color y no se preocupe por combinar colores. Deja que tus instintos te guíen. Después de comenzar con el primer color, el resto seguirá de forma natural. Susan F. Fincher, autora de numerosos libros para colorear mandalas, dice: "Un color en el mandala invita a otro, como un invitado que pide llevar a su amigo a tu fiesta".

Encuentra mandalas para colorear

Existen numerosos recursos donde puedes encontrar mandalas para colorear e integrar en tu práctica de meditación. Los sitios web como ColorMandala.com le permiten imprimir mandalas desde su computadora. También puede encontrar libros para colorear mandalas, como los libros de Fincher de Shambhala Publications.

Otra opción más es dibujar tu propio mandala. Al usar herramientas de dibujo básicas como una brújula y un transportador, también puede crear sus propios patrones geométricos para colorear. Son bastante simples y no hay formas correctas o incorrectas de dibujarlos, simplemente comience a crear formas dentro de un círculo grande.