Las emociones intensas pueden ser difíciles de manejar. Ya sea que se sienta muy enojado o realmente triste, las habilidades de regulación de las emociones pueden ayudar a reducir la intensidad y la duración de esos sentimientos incómodos.


La próxima vez que se sienta realmente emocionado, estas siete estrategias pueden ayudar.

Identifique cómo se siente

Poner un nombre a lo que sientes puede ayudarte a dar sentido a tus emociones. Pensar en algo como "Estoy ansioso en este momento" o "Estoy realmente decepcionado" puede ayudarlo a aclarar lo que está sucediendo.

Los estudios demuestran que etiquetar una emoción le quita algo de dolor. Entonces, simplemente identificar su emoción podría ayudarlo a sentirse un poco mejor de inmediato. 

Puede simplemente pensar en lo que está sintiendo e intentar nombrarlo. O puede escribir en un diario que le ayude a entender las cosas. También puede encontrar que hablar con alguien y etiquetar sus emociones en voz alta le ayude a sentirse mejor.

A veces la gente habla de sentimientos como si fueran buenos o malos. Pero las emociones no son positivas ni negativas. Todas las emociones pueden ser útiles o inútiles.

Tomemos, por ejemplo, la ansiedad. La ansiedad es útil cuando te alerta sobre un peligro. Si suena la alarma de ansiedad cuando se encuentra en una situación insegura (como si estuviera demasiado cerca del borde de un acantilado), es probable que responda de una manera que lo mantenga más seguro. En ese caso, su ansiedad es útil.


Sin embargo, si evita dar un discurso que podría avanzar en su carrera porque hablar en público provoca demasiado ansiedad, entonces su ansiedad no es útil.


Del mismo modo, la ira puede ser útil si te da el valor de crear un cambio positivo. Es inútil si te hace decir o hacer cosas de las que luego te arrepientas.

Si sus emociones son útiles, es posible que desee abrazarlas. Si sus emociones no le ayudan, puede tomar medidas para manejarlas.

Experimente con habilidades de afrontamiento saludables

Las habilidades de afrontamiento saludables lo ayudan a superar las emociones difíciles sin adormecerlas, reprimirlas o ignorarlas. Pueden distraerte un poco temporalmente para que puedas sentirte mejor o pueden ayudar a calmar tu cuerpo o mejorar tu estado de ánimo.

Las estrategias de afrontamiento que funcionan para una persona pueden no funcionar para otra, por lo que es importante encontrar las habilidades de afrontamiento que mejor funcionen para usted.

Algunos ejemplos de habilidades de afrontamiento saludables pueden incluir hacer ejercicio, leer un libro, tomar un baño, escuchar música, pasar tiempo en la naturaleza o llamar a un amigo.

Esté atento a las habilidades de afrontamiento poco saludables que pueden introducir nuevos problemas en su vida o hacer que se sienta peor con el tiempo. Beber alcohol, consumir drogas o comer en exceso son solo algunos ejemplos de habilidades de afrontamiento que pueden ayudarlo a sentirse mejor temporalmente, pero crearán problemas mayores para su vida a largo plazo.

Acepta cómo te sientes

A veces, sentarse con una emoción incómoda es lo mejor que puede hacer. Eso puede significar reconocer lo que está experimentando y luego seguir su rutina diaria de todos modos.

Puede notar que está triste o ansioso y decide continuar trabajando en un proyecto o incluso puede tomar un descanso solo para prestar atención a lo que está experimentando. ¿Cómo afectan tus emociones a tus pensamientos? ¿Cómo te afectan físicamente?

Cuando se siente enojado, por ejemplo, sus pensamientos pueden permanecer enfocados en lo negativo. Y es posible que experimente reacciones fisiológicas, como un aumento de la frecuencia cardíaca.

Simplemente darse cuenta de esas cosas, sin juzgarse a sí mismo, puede ser útil. Si empiezas a pensar cosas como "No debería sentirme así", recuerda que está bien sentir lo que sea que estés sintiendo y que el sentimiento es solo temporal. Eventualmente, pasará.

Replantear pensamientos inútiles

Esté atento a los pensamientos inútiles que alimentan sus emociones incómodas. Pensando cosas como, "¡No puedo soportar esto!" o “Sé que va a pasar algo malo”, solo te hará sentir peor.

Cuando se dé cuenta de que tiene pensamientos inútiles, tómese un minuto para reformularlos . Puede desarrollar una frase simple para repetirse, como "Esto es incómodo, pero estoy bien".

También puede preguntar: "¿Qué le diría a un amigo que tuviera este problema?" Es posible que descubra que les ofrecerá palabras de aliento amables y compasivas. Intenta ofrecerte esas mismas palabras amables.

Actúa como si te sintieras feliz

Si bien a veces es útil aceptar las emociones incómodas por un tiempo, tampoco querrás quedarte atrapado en ellas. Sentirse realmente triste durante demasiado tiempo o sentirse realmente enojado puede mantenerlo atrapado en un lugar oscuro.

A veces, es útil cambiar de manera proactiva su estado emocional. Una de las mejores formas de hacerlo es cambiando su forma de comportarse.

En lugar de sentarse en el sofá sin hacer nada cuando se siente triste, podría preguntarse: "¿Qué estaría haciendo ahora mismo si me sintiera feliz?" Quizás irías a caminar o llamarías a un amigo. Haz esas cosas ahora, aunque no te apetezca.

Puede encontrar que cambiar su comportamiento cambia cómo se siente. Actuar como si se sintiera mejor podría ayudarlo a comenzar a sentirse mejor.

Obtenga ayuda profesional

Si tiene dificultades para controlar sus emociones, hable con un profesional. Puede comenzar hablando con su médico. Explique cómo se ha estado sintiendo y es posible que su médico quiera asegurarle que no hay causas médicas conocidas detrás de su cambio en el bienestar.

También puede comunicarse con un profesional de salud mental con licencia . La dificultad para manejar sus emociones puede ser una señal de un problema de salud mental subyacente, como ansiedad o depresión. La terapia de conversación, los medicamentos o una combinación de los dos pueden ayudar.

Una palabra de Verywell

Está bien ser una persona emocional. Llorar cuando mira películas (o incluso comerciales), sentirse apasionado por las cosas que ama y enojarse por la injusticia social son señales de que es humano, no señales de alerta de que necesita ayuda.

Ser emocional solo se convierte en un problema cuando crea problemas en tu vida. Si sus emociones le dificultan tener relaciones saludables, mantenerse productivo en el trabajo o tener éxito en la escuela, puede beneficiarse de la ayuda profesional.