La disgrafía es un tipo de discapacidad de aprendizaje que afecta la capacidad de escribir letras y palabras en papel y de comprender la relación entre los sonidos, las palabras habladas y las letras escritas. En el lenguaje de las regulaciones federales de educación especial, la disgrafía se considera un subtipo de discapacidad específica del aprendizaje, específicamente una discapacidad en la expresión escrita. 


Características

Las personas con disgrafía tienen dificultades sustanciales con el lenguaje escrito a pesar de recibir instrucción formal. Su escritura a mano puede incluir reversiones o errores de ortografía, y puede ser ilegible. Algunos estudiantes con disgrafía también pueden tener dificultades con el procesamiento del lenguaje y la conexión entre las letras visuales y los sonidos que representan. Por ejemplo, pueden deletrear verbalmente una palabra, pero tienen dificultad para deletrearla en papel. 

La disgrafía se reconoce con mayor frecuencia en los niños cuando se les presenta por primera vez la escritura. Puede desarrollarse en adultos después de un traumatismo o accidente cerebrovascular. 

Conceptos erróneos sobre la disgrafía

Las personas con disgrafía tienen mucha más dificultad para escribir que otras, pero sus habilidades en otras áreas pueden ser promedio o mejores. Corren el riesgo de ser vistos como perezosos y descuidados con su trabajo debido a la frustración y la fatiga que experimentan cuando hacen el esfuerzo que les cuesta completar tareas aparentemente fáciles. Los educadores deben brindarles experiencias de aprendizaje positivas que les ayuden a mantener su  autoestima  y motivación.

Teorías sobre las causas de la disgrafía

Se cree que la disgrafía implica dificultades con las habilidades motoras finas, como la memoria motora, la coordinación muscular y el movimiento al escribir. También se cree que los centros del lenguaje, visuales y motores del cerebro desempeñan un papel. La evidencia sugiere que puede ser hereditario. Las personas que han sobrevivido a lesiones cerebrales o accidentes cerebrovasculares también pueden mostrar signos de disgrafía. 

Pruebas

Las evaluaciones psicológicas y educativas integrales pueden ayudar en el diagnóstico de disgrafía. Las pruebas de diagnóstico de escritura se pueden utilizar para determinar si las habilidades de escritura del alumno son normales para su edad. Las pruebas también pueden proporcionar información sobre su procesamiento de escritura.

A través de las observaciones, el análisis del trabajo de los estudiantes, la evaluación cognitiva y las evaluaciones de la terapia ocupacional, los educadores pueden desarrollar planes integrales de  tratamiento individualizado.

Instrucción y terapia

Los educadores utilizan una variedad de métodos para desarrollar el programa de educación individual (IEP) del estudiante. Los programas típicos se enfocan en el desarrollo de habilidades motoras finas como agarrar el lápiz, coordinación de manos y desarrollar la memoria motor-muscular. La terapia del lenguaje y la terapia ocupacional ayudan al alumno a desarrollar conexiones importantes entre letras, sonidos y palabras. Algunos estudiantes trabajan mejor con programas de reconocimiento de voz o teclado. 

Qué hacer con la disgrafía

Si cree que usted o su hijo tienen disgrafía y pueden tener problemas de aprendizaje, comuníquese con el director o consejero de su escuela para obtener información sobre cómo solicitar una evaluación.

Para los estudiantes en programas universitarios y vocacionales, la oficina de asesoría de su escuela puede ayudarlos a encontrar recursos que ayuden a asegurar su éxito.

Etiquetas de diagnóstico como disgrafía y dificultades de aprendizaje

Es posible que la escuela de su hijo no use el término disgrafía, pero aún puede evaluar a su hijo de manera apropiada. Normalmente, las escuelas públicas utilizan las etiquetas y el lenguaje de las regulaciones federales de IDEA . La disgrafía es un término de diagnóstico que se encuentra en los sistemas de diagnóstico psiquiátrico. Las escuelas lo consideran uno de los varios tipos de trastornos que pueden atender bajo la etiqueta de discapacidad de aprendizaje.